Los procedimientos comienzan con un riguroso cumplimiento de la normatividad, cuando un animal ingresa a nuestras instalaciones lo hace con la chapeta y la certificación de movilización del ICA, a continuación, se separa por lotes para el pesaje en báscula electrónica después de cumplir su cuarentena.

Antes del sacrificio es sometido a un examen ante-mortem por el personal veterinario debidamente autorizado por el Invima, así  es bañado y conducido al área de aturdimiento donde se insensibiliza por medio de aturdidor eléctrico de dos polos los cuales aplican corriente por pocos segundos y es dejado inconsciente con el fin de evitar estrés e incomodidad, a continuación, el animal es izado para proceder a su sacrificio por desangre para ser ingresado al escaldado y depilado automatizado e identificación mediante precinto con código único de trazabilidad pasa al anudado de recto y eviscerado pulido, lavado de canales tolerancia cero y finaliza con el  pesaje electrónico de canal y traslado a cuartos de refrigeración.